Muy saludable es la práctica de consumir té verde, en especial si se trata del té verde japonés, pero debido a su sabor, el cual es más concentrado que el de la mayoría de los tés comerciales, la mayoría terminan abandonando el barco de la salud antes de que zarpe si quiera.
Pero, existe una muy buena opción para quienes desean comenzar la travesía de la longevidad de la cual han gozado los japoneses durante cientos de años: el té kukicha es la mejor opción para iniciarse en el maravilloso hábito de consumir té verde, pues, a diferencia de los otros su sabor es más suave y con notas un poco más occidentales, como lo son los frutos secos por ejemplo.
Además, este té responde muy bien a la filosofía de la integridad que enseñan los budistas zen japoneses, donde se cree que todas las partes de la planta del te son aprovechables, todas se convierten en te, por lo que no hay necesidad de desechar ninguna de sus partes.
Así que ya no hay más excusas para añadir a la dieta diaria una taza de un saludable té verde, pero quizás surjan las interrogantes ¿qué es realmente el té kukicha? ¿De dónde se obtiene? ¿Cómo se prepara? ¿Cuáles son los beneficios reales de ingerirlo? Pero todas ellas se responden a continuación.
¿Qué es el té kukicha?
El té kukicha es una variedad de té verde muy particular, pues aunque se obtiene de la misma planta Camellis sinansis, no se utiliza para su preparación las hojas si no los tallos de la misma y es justo por esta razón que también se le conoce como Boucha que significa té de palo o de ramitas.
Originalmente al té kukicha se le consideró un subproducto del té matcha, del sencha y del gyokuro, para los cuales se separaba la hoja del tallo para así obtener un té de mayor grado. Como los tallos sobraban, los campesinos sacaban té de ellos porque en realidad resultaba muy barato hacerlo.
Pero ya con el tiempo, el té kukicha fue ganando reconocimiento gracias a su inigualable sabor, el cual es mucho más suave, y aunque tiene un sabor más parecido a la paja, tiene también sutiles notas a nuez que se queda en la boca durante mucho tiempo.
Los paladares más delicados consideran que tiene un sabor más bien afrutado con suaves luces de menta que hacen de esta variedad una de las más refrescantes.
Todo ese sabor casi indescriptible, que deja de lado al sabor herbal y marino típico de los tés japoneses, se debe a la forma en la que se obtiene el té kukicha, pues su principal ingrediente son los tallos internos de las hojas del té verde japonés, los cuales son cortados con una longitud específica y se agrupan según su grado.
Conforme al método clásico japonés, estos tallos se procesan sometiendo las hojas de té al vapor, mediante una fuente de calor húmedo durante un breve período de tiempo. Es así como se obtiene la oxidación natural de la hoja.
Aunque este es el método más utilizado, existe otro método más extendido en donde se tuesta el producto ya vaporizado, siendo este último paso el que le imprime el sabor a fruto seco y un tanto acaramelado, el cual se aprecia mucho en una ciudad de Japón llamada Kaga. Tanto es así que el kukicha tostado se le conoce como Kaga boucha.
Con respecto a su aspecto es importante señalar que los tallos con los que se elabora esta variedad de té varían entre el color gris, muy similar al plateado y el verde claro, pero, cuando se elabora la infusión con ellos, se vuelven más bien entre verde claro y amarillo, incluso puede llegar a alcanzar tonos más bien dorados, aunque, claro está, cuando se tuesta, estas variaciones pasan a ser amarronadas.
La infusión por su parte es brillante, con cierta turbidez, la cual es muy típica de los tés japoneses, de un color amarillento pero con un suave tono verdoso y su aroma es bastante diferencial.
Vale la pena resaltar que el té kukicha recibe también otros nombres dependiendo el lugar donde se elabore y el proceso de producción que se utilice para obtenerlo. Por ejemplo, en Kyoto se le conoce como Karigane, que significa ganso salvaje, siendo este un nombre raro para una variedad de té, se le adjudica debido a que los gansos salvajes suelen reposar sobre las ramas que flotan en el mar de Japón mientras migran.
Regularmente el Karigane se elabora con los tallos de Sencha y Gyokuro del más alto grado.
Pero karigane no es el único nombre que recibe, pues en otras partes de Japón también se le conoce como Shiraore, que significa pliegue blanco.
En otras partes, como en Kaga, se le conoce como Boucha, que significa te de palos, incluyéndose una variedad que se denomina Kaga boucha, adjudicándole el nombre de la región donde se prepara y siendo este el preferido de la prefectura de Ishikawa, el cual no es más que el té kukicha tostado, en el que se pueden conseguir pequeños taños marrones que se asemejan a los del te hojicha.
¿Cómo preparar el té de kukicha?
Preparar este té en realidad es bastante sencillo, y, aunque los japoneses que prefieren el kukicha tostado, hacen este proceso en sus casas, lo cierto es que se puede conseguir en las tiendas especializadas en productos japoneses o naturales la variedad ya lista para ser preparada.
Para obtener una taza de té kukicha no se necesita más que agua muy caliente, cuya temperatura se encuentre entre 70° y 90° para no quemar el té y cambiarle su exótico sabor. A esta agua se le han de agregar 2 cucharadas colmadas de kukicha y se le deja reposar por máximo 3 minutos, a menos que se guste de un sabor más concentrado, el cual se puede obtener dejando correr más tiempo de reposo.
Esta variedad de té tiene un precio bastante accesible, pero el hecho de que pueda ser reutilizado unas 3 veces lo hace aún más económico.
Algo que se debe considerar al tomar cualquier variedad de té verde con el estómago vacío es que su amargor suele ocasionar problemas gastrointestinales como acidez estomacal o estreñimiento.
También es válido aclarar que los tallos de la Camellia sinensis contienen menos cafeína que sus hojas, y por ello, el té kukicha tiene una cantidad insignificante de cafeína en comparación a otras variedades de té verde. Pero aunque sus niveles de cafeína son bajos, igualmente se considera un té energizante, el cual aporta mucha vitalidad naturalmente, y es justo por esta razón que los japoneses regularmente lo ingieren junto al desayuno.
Beneficios del té kukicha
La cualidad más resaltante del té kukicha es su alto contenido de calcio, el cual supera 6 veces a la cantidad de este mineral que aporta un vaso de leche de vaca. Es por esta razón que esta variedad de té se recomienda a las personas que padecen de osteoporosis o cualquier otra enfermedad que degenere el sistema óseo, ya que el calcio no solo fortalece los huesos, sino que también promueve su desarrollo.
El kukicha también es recomendable para todas aquellas personas que tienen un nivel bajo de calcio en su organismo, y ya que su contenido de cafeína es irrisorio, se puede consumir este té en los períodos de lactancia en los que la madre regularmente se descalcifica.
Además, el calcio, en combinación con el flúor que contiene de manera intrínseca el té verde, ayuda mantener la salud bucal al fortalecer los dientes y prevenir las caries.
Por otra parte, en la actualidad, los nutricionistas tienen la tendencia a recomendar dietas macrobióticas, la cual se basa en la creencia de que para gozar del bienestar pleno o de un estado de salud óptimo, es necesario alcanzar el equilibrio.
Por esta razón, la dieta macrobiótica consiste en la ingesta de alimentos naturales y muy completos, que aporten grandes cantidades de vitaminas y minerales al organismo, por ende es una dieta en la que se consumen los granos enteros, los cereales integrales, verduras y frutas orgánicas, toda la variedad de legumbres existente e inclusive algas marinas.
De la combinación de estos alimentos se obtiene una rica cantidad de aminoácidos, minerales y vitaminas que son esenciales para el buen funcionamiento del organismo. En este tipo de dieta hay una bebida por excelencia y esta es el té de kukicha, ya que además de ser una bebida rica en vitamina A, C, y algunas vitaminas del grupo B, también contiene minerales como el selenio, el cobre, el zinc, el magnesio, el calcio y el flúor.
Toda esta combinación enriquecida con mucho sabor permiten que el cuerpo logre alcanzar un pH perfectamente balanceado y, por ello, se le adjudica al té de kukicha un gran poder alcalinizante, ya que toda esa basta combinación neutraliza la acidez de los alimentos, condición que favorece la digestión justamente de los alimentos más complejos como lo son los alimentos integrales.
A la par que fortalece todo el sistema inmune, el té kukicha es ideal para combatir resfriados, aunque ciertamente sus niveles de antioxidantes son menores, de igual manera las catequinas y polifenoles típicos del té verde están contenidos en esta variedad de té.
Otra propiedad atribuible al té kukicha es la baja cantidad de teína que posee, ya que la mayoría de este componente se encuentra en las hojas, por lo que es una bebida enriquecida que pueden disfrutar todos los integrantes de la familia a cualquier hora del día.
Referencias:
- https://shawellnessclinic.com/es/shamagazine/propiedades-del-te-kukicha/
- http://www.ippodo-tea.co.jp/en/tea/component.html
- https://royaltipstea.com/blog/es/las_propiedades_del_te_kukicha/
- https://www.botanical-online.com/en/medicinal-plants/tea-kukicha
- https://www.greenteasource.com/kukicha
- https://en.wikipedia.org/wiki/Kukicha
- https://www.myjapanesegreentea.com/kukicha
- http://www.natural-salt-lamps.com/benefits-greentea.html
