El comino negro, llamado Nigella sativa, pertenece a la familia de las ranunculales. Esta planta es nativa del sur oeste de Asia, el Mediterráneo y África. El aceite de comino negro es apreciado por sus cualidades aromáticas y medicinales.
El aceite de comino negro también es conocido como aceite de semilla negra, de kalonji o de semillas de cebollas.
El aceite de comino negro proviene de las semillas de la hierba Nigella Sativa, que se caracteriza por sus pequeñas flores de colores entre el blanco y el morado. Este arbusto produce pequeños frutos, de los que se extraen las semillas utilizadas para producir el aceite de comino negro.
Las semillas de comino negro han sido ampliamente utilizadas como remedio naturista por diversas culturas alrededor del mundo. Además, es un ingrediente apreciado en la preparación de curries, pepinillos y panes de manera similar al comino ordinario y el orégano.
El aceite de comino negro puede ser ingerido directamente, tomado como suplemento o aplicado tópicamente para apreciar sus beneficios. Además, este aceite puede ser utilizado como aditivo para shampoos, cremas y demás cosméticos caseros.
Entre los principales componentes del aceite de cominos se encuentran los timoquinonos, que tienen poderosas propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. El aceite de comino negro de más alta calidad además puede ser utilizado en la cocina, como ingrediente en diversas preparaciones.
Historia del uso del aceite de comino negro
El uso terapeútico y culinario de las semillas de comino negro, también conocida como flor de hinojo, se remonta a más de 3000 años. El aceite extraído de esas semillas fue ampliamente utilizado en el tratamiento de diversas afecciones como irritaciones en la piel, picaduras, llagas, inflamaciones y sarpullidos.
Según las investigaciones, los primeros en usar el aceite de comino negro fueron los Asirios, en el antiguo Egipto. Esta sustancia fue especialmente apreciada por la realeza, siendo empleada por monarcas como Cleopatra y Nefertiti en sus rituales de belleza.
En la India y el Medio Oriente, las semillas de comino negro eran asadas y utilizadas como especias y sazonadores para vegetales, legumbres, panes, curries, queso de hebra, entre otras preparaciones. Gracias a su sabor amargo y punzante, las semillas de comino negro fueron apreciadas en la cocina de estas culturas junto con otras especias como la pimienta, el orégano y las cebollas.
En la medicina griega tradicional, las semillas de comino negro y sus extractos eran utilizados en el tratamiento de las caries, los dolores de cabeza, la congestión y los parásitos intestinales. Gracias a sus propiedades vigorizantes, el aceite de comino negro solía ser recetado para los pacientes que presentaban debilidad y decaimiento.
Otros usos del aceite de semilla de comino incluían la estimulación de la producción de leche materna en las mujeres, así como el inicio de la menstruación.
En la medicina ayurvédica, el aceite de comino negro ha sido aprovechado principalmente por sus cualidades estimulantes y propiedades tónicas. Además, esta sustancia es empleada como regulador del estado de ánimo, del apetito y del metabolismo, promoviendo la armonía psicológica y fisiológica.
Usos del aceite de comino negro
El aceite de comino negro tiene una gran cantidad de usos. Esta sustancia se caracteriza por ser especialmente versátil, teniendo propiedades nutricionales, cosméticas y medicinales, que pueden ser aprovechadas de una gran cantidad de maneras.
Aplicado tópicamente, el aceite de comino negro debe ser diluído en un aceite portador para tratar diversas afecciones cutáneas como el acné y los eczemas gracias a sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Incluso puede ser útil en el combate de la psoriasis y la rosácea.
Para aprovechar mejor sus beneficios, el aceite de comino negro puede ser integrado a aceites para masajes y lociones caseras. Con un par de gotas de esta poderosa sustancia es más que suficiente para sacarle provecho a sus propiedades.
Por su composición rica en vitaminas, minerales y ácidos grasos, este aceite es ideal para proporcionar hidratación a la piel: combinado con productos de cuidado para la piel, es capaz de dejar la dermis con una apariencia radiante y renovada.
Además, el aceite de comino sirve de aditivo para productos para el cabello como shampoos y acondicionadores, promoviendo la salud del cabello y el cuero cabelludo, además de aportar una agradable fragancia.
Gracias a su sabor picante y especiado, el aceite de comino de más alta calidad puede ser el aditamento perfecto para platillos que busquen un toque oriental en su sabor. El aceite de comino es ideal para sazonar carnes, sopas y estofados, así como darle un toque exótico a batidos y bebidas.
Terapéuticamente, el aceite de comino negro tiene efectos antisépticos y antibacterianos, ayudando a eliminar bacterias y previniendo su desarrollo, mejorando el sistema inmunológico del cuerpo. Además, por sus propiedades antiinflamatorias y calmantes, puede ser utilizado en el tratamiento de las molestias y dolores relacionados con el reumatismo.
En aromaterapia, el aceite de comino negro puede ser inhalado a través de un difusor, siendo especialmente útil en el tratamiento de los síntomas del asma y la bronquitis. Para aprovechar sus propiedades, también puede ser diluído en agua hirviendo. inhalando los vapores.
Los mejores aceites de comino negro son aquellos 100% puros, sin aditivos. En general, se recomiendan aquellos aceites de semilla de comino negro que sean extraídos mediante el prensado al frío. Esto significa que el aceite es extraído de las semillas sin la aplicación de calor externo, lo que en general resulta en una sustancia más rica y con mejores cualidades.
Beneficios del uso de aceite de comino negro
El uso de aceite de comino ha demostrado ser efectivo en el combate de ciertas condiciones de salud, así como su consumo reporta grandes aportes nutricionales. Por esta razón, el uso de esta sustancia se remonta a miles de años: es uno de los aceites más versátiles y saludables disponibles en el mercado. Según medios especializados, estos son los principales beneficios del uso y consumo de aceite de comino negro:
- Disminuye la presión arterial: según estudios, el consumo continuado de aceite de comino negro puede tener un impacto positivo en la disminución de los niveles de presión arterial de pacientes con la presión sanguínea ligeramente elevada.
- Regulador de los niveles de colesterol: debido a su composición rica en ácidos grasos esenciales, el consumo regular de aceite de comino negro puede ayudar a mantener los niveles de colesterol en la sangre dentro de parámetros saludables.
Entre los principales ácidos grasos contenidos en el aceite de comino se encuentra el ácido linoleico y el ácido oleico, dos compuestos beneficiosos para el cuerpo humano.
- Alivio de los síntomas de la artritis reumatoide: el consumo de aceite de comino negro o la toma de suplementos de esta sustancia puede ayudar a reducir los síntomas de la artritis reumatoide asociados a la inflamación.
- Alivio de los síntomas del asma: gracias a sus propiedades antiinflamatorias, el aceite de comino negro puede ayudar a disminuir los síntomas del asma, mejorando la respiración. El efecto desinflamatorio de este aceite en las vías respiratorias también puede ayudar en el tratamiento de la bronquitis.
- Tratamiento de malestares estomacales: el consumo de las semillas de comino negro o de este aceite puede ayudar a aliviar el dolor y los cólicos estomacales, según estudios. Además, podrían ayudar a reducir la sensación de hinchazón, los gases y la gravedad de las úlceras.
- Tratamiento de los síntomas del acné: según investigaciones realizadas, el uso de lociones con aceite de comino negro como ingrediente activo pueden tener un impacto positivo en la reducción de la incidencia de los brotes de acné. Esto es posible gracias a las propiedades antibacterianas de esta sustancia.
- Tratamiento de heridas: uno de los usos tradicionales del aceite de comino negro es el tratamiento de heridas superficiales. La aplicación de este aceite puede ayudar a prevenir la presencia de bacterias y disminuir la inflamación, además de estimular la reparación de la piel.
- Anticancerígeno: según investigaciones realizadas, las timoquinonas presentes en el aceite de comino negro pueden intervenir en la muerte de las células dañinas implicadas en diversos tipos de cáncer como la leucemia, el cáncer cerebral y de mamas. Estas investigaciones si bien aún no han comprobado la efectividad de este aceite en pacientes humanos, ofrece resultados prometedores.
- Mejora de la función renal y hepática: investigaciones realizadas en animales han demostrado el potencial efecto positivo del consumo de aceite de comino negro en la reducción de las complicaciones renales y hepáticas, así como en la recuperación de la estructura de estos órganos.
Riesgos y precauciones del uso de aceite de comino negro
Existen pocas investigaciones que documenten los efectos a largo plazo del consumo de aceite de comino negro o en grandes cantidades. Si existe evidencia que vincule la aplicación tópica directa sobre la piel con reacciones alérgicas e irritantes sobre la piel: por esta razón, se recomienda diluirlo en un aceite portador o una loción antes de aplicarlo.
De igual manera, los especialistas recomiendan hacer una aplicación pequeña sobre la piel para descartar una posible reacción alérgica (dermatitis de contacto es la más común) antes de iniciar cualquier tratamiento o terapia con esta sustancia.
Según algunos reportes, un componente del aceite de comino negro podría ser tóxico. La melantina encontrado en esta sustancia puede ser dañino para el cuerpo humano en caso de ser administrado en grandes cantidades, pudiendo causar brotes de ampollas y comezón en la piel.
El aceite de comino negro puede tener efectos anticoagulantes, aumentando el riesgo de hemorragias. Para pacientes con desórdenes hemorrágicos o bajo tratamientos con medicamentos que afectan la coagulación , el consumo de aceite de comino negro está contraindicado.
Aunque el consumo de comino negro puede ayudar a preservar la salud del hígado y los riñones, un exceso de esta sustancia puede impactar negativamente estos órganos. Además, es posible que esta sustancia interactúa con algunos medicamentos comunes como la warfarina. Por esta razón, se recomienda evitar el consumo de esta sustancia al menos dos semanas de una cirugía.
Las mujeres embarazadas o lactantes deberían evitar el consumo de aceite de semilla de comino negro. Antes de iniciar cualquier tratamiento o consumo de esta sustancia, se recomienda consultar con un especialista. El uso del aceite de comino negro no debería ser sustituto de ningún tratamiento médico regular sin el consentimiento de un profesional de la salud.
