Una de las variedades de té verde japonés de más alto grado se llama gyokuro, el cual fue descubierto y fabricado desde entonces en el año 1835. Su nombre, el cual se traduce como rocío de joya o rocío de jade hace alusión al color verde pálido que toma la infusión por el tipo de hojas escogidas para elaborarlo, ya que las mismas son los brotes más jóvenes de la planta Camellia sinensis, pero no cualquier brote tierno, sino aquellos que han sido cultivados bajo la sombra.
A diferencia del té sencha que se cultiva donde los rayos del sol bañan las hojas de la variedad Yabukita de la Camellia sinensis, el té gyokuro se resguarda más bien de tal luminiscencia a las variedades Yamakai, Asahi, Okumidori y Saemidori de la misma planta.
De hecho, esta forma de cultivar bajo la sombra durante al menos dos semanas previas a la cosecha, hace que el té gyokuro tenga una mayor concentración de teanina y cafeína en sus hojas y justamente estos componentes le otorgan el sabor umami y dulce a este té verde tan peculiar y costoso.
Proceso de elaboración
En cuanto el proceso de elaboración de esta variedad debemos resaltar que el mismo es un proceso bastante minucioso a la vez que delicado, por lo que su precio está muy bien justificado.
Todo comienza a principios de abril, cuando comienzan a brotar las primeras hojas, es allí cuando la plantación del gyokuro es tapada con grandes pantallas de paja de arroz y caña durante los 20 días subsiguientes.
Es así como se reduce la tasa de fotosíntesis al reducir la entrada directa de luz solar. Este pequeño paso del proceso eleva considerablemente el contenido del aminoácido propio del té verde, el cual es totalmente responsable de su sabor.
Completada esta parte del proceso de cultivo, tan solo queda esperar los primeros días de Mayo, que en el calendario japonés marca la primera cosecha de té en el año.
Llegado el momento, la selección y recolección de las hojas para el gyokuro se vuelve muy cuidadosa. Las hojas seleccionadas son las más jóvenes ya que contiene poca lignina, asegurándose así de haber escogido las mejores hojas, las más frescas y de mejor calidad, y, por tanto, con mejor sabor.
Luego de haber cosechado las mejores hojas, las mismas son cocidas al vapor durante 15 segundos, a lo sumo 20. Esta cocción evita la oxidación de las hojas, pues se rompen las células de las mismas, liberando así las enzimas y el agua de estas. Posteriormente se secan muy bien, este proceso se ablandan las fibras, fijando así los componentes que aportan la fragancia y el color al gyokuro.
Este proceso de secado se hace por etapas, se comienza con un balanceo suelto y se termina con una vuelta apretada de tuerca, siendo esta última etapa la que da la forma de aguja a las hojas de este té. Con un buen secado se logra reducir el exceso de grasa, matar las enzimas oxidasas, inhibe las reacciones químicas e incrementa la apariencia, color y fragancia del gyokuro.
Finalizado el proceso de secado, las hojas se clasifican a fin de utilizar solamente las finas hojas que han sido fuertemente retorcidas, pues en el retorcido se encuentra la esencia del té.
¿Cómo preparar el té gyokuro?
Si ya se cuentan con las hojas secas de gyokuro, lo primero que hay que hacer para disfrutar de una taza de este rico té es poner a hervir agua. Una vez que rompa el hervor se deja reposar unos 2 minutos para que descienda la temperatura a unos 90°C.
Transcurrido este tiempo, se debe agregar al agua dentro de la tetera aún unos 6 gramos de té de gyokuro, permitiendo que repose dentro de ella un par de minutos para finalmente obtener una rica infusión del té verde de la más alta calidad.
Propiedades y Beneficios del té gyokuro
El té gyokuro es un té verde rico en polifenoles, flavonoides y proantocianidinas, siendo estos los más potentes antioxidantes para destruir los radicales libres que destruyen las células de nuestro cuerpo. Estos antioxidantes también tienen el poder de eliminar las toxinas ambientales que accionan sobre las membranas celulares o directamente sobre el ADN destruyéndolos progresivamente.
Este efecto de los radicales libres sobre nuestro organismo no solo acelera el proceso de envejecimiento, sino que también propicia muchas enfermedades degenerativas como es el caso de ciertas enfermedades cardiovasculares y el cáncer.
Es por ello que en la medicina asiática tradicional, el gyokuro es un té esencial para tratar no solo las enfermedades cardiacas, sino también la diabetes y ciertos trastornos digestivos, de hecho, se ha podido comprobar a través de estudios científicos que efectivamente el gyokuro ejerce una excelente influencia orgánica que beneficia a lo sumo nuestra salud.
Por ejemplo, se logró constatar en una investigación llevada a cabo por el Memorial Sloan-Kettering Cancer Center, que el epigallocatechin-3-galatte, mejor conocido como EGCG, protege las células sanas de los compuestos cancerígenos. Además, los estudios epidemiológicos y clínicos señalan que el té verde puede ser de gran ayuda para prevenir el cáncer de vejiga, ovarios, mama, páncreas y próstata.
Asimismo, un estudio clínico que fue publicado en el año 2006 en el Cancer Research, donde 30 hombres que se encontraban en una condición en la que su próstata se había diagnosticado precancerosa, al consumir diariamente té verde o suplementos de té verde durante un año, desarrollaron menos cáncer que el grupo control a los que se les suministraba placebo. Y lo más prometedor es que otros estudios similares arrojaron resultados análogos sobre otros tipos de cáncer.
Por otra parte, se ha logrado comprobar que el consumo habitual del té gyokuro reduce la acumulación de grasa en las arterias, a la que clínicamente se le llama placa. Esto es posible porque los componentes nutricionales del té verde elevan los niveles del colesterol bueno, disminuyendo así el colesterol total, esta acción, sumada a la reducción de la oxidación del colesterol debido al poder antioxidante del gyokuro, es más que suficiente para disminuir la formación de placa.
De hecho, en diversos estudios clínicos realizados en el Centro Médico de la Universidad de Maryland, se logró demostrar que sus polifenoles bloquean la absorción del colesterol en intestinos, aumentando de este modo la excreción del mismo.
Es por esta razón que el gyokuro es un excelente aliado para prevenir o retardar la aterosclerosis. En efecto, los expertos señalan que tomar 3 trazas diarias de este té reduce un 11% la probabilidad de llegar a sufrir un ataque cardíaco.
Entre otros beneficios atribuibles al consumo del té gyokuro encontramos que esta variedad de té verde ayuda a disminuir el riesgo de padecer diabetes, pues tiene la propiedad de mantener la glucosa en niveles saludables al reducir el estrés en las células pancreáticas, las cuales se encargan de producir la insulina.
El hígado es otro órgano que se beneficia del consumo del gyokuro, ya que es el primer afectado cuando ingerimos sustancias tóxicas. Además, el EGCG presente en esta variedad de té ayuda a tratar efectivamente la hepatitis ya que reduce la inflamación que el virus ocasiona.
Otra cualidad atribuible al té gyokuro es que este es un excelente aliado para la pérdida de peso, pues sus polifenoles aceleran el metabolismo ayudándola a quemar grasa más rápidamente.
Con respecto a esta propiedad es válido destacar que en el año 2005 se publicó en el Obesity Research que sujetos en estudio que tomaron té verde y cafeína mostraron a largo plazo un mejor mantenimiento de la pérdida de peso.
Una de las propiedades que hace destacar al té gyokuro es su alto contenido de L-teanina, un aminoácido que sólo se encuentra en la Camellia sinensis y que, como ya se ha hecho mención, tiene una mayor concentración en las que son reservadas para cultivar gyokuro, pues se cultivan bajo la sombra.
Entre las propiedades que se le atribuyen a la L-teanina es su capacidad de reducir el estrés sin afectar la energía. Y es por esta razón que tras una taza de té nuestra concentración es mejor, porque estimula nuestra actividad cerebral manteniéndonos alerta pero relajándonos a la vez sin inducir el sueño.
Este aminoácido, como era de esperarse, se absorbe a través del intestino y de allí pasa al torrente sanguíneo hasta atravesar la barrera hematoencefálica. Esta actividad provoca el aumento de dos de los neurotransmisores fundamentales: la dopamina y la serotonina, es así como en dosis pequeñas disminuye la tensión emocional y el estado de ánimo, a la par que aumenta la concentración y estimula el aprendizaje.
Además, al pasar por el hígado, este aminoácido es convertido en etilamina, sustancia que aumenta la respuesta del sistema inmune ante ciertas bacterias, virus y hongos.
Como se puede ver, consumir 3 tazas al día de este maravilloso té otorgará a nuestro organismo grandes beneficios que estimularan la buena salud y nos ayudará a combatir los inevitables signos de la edad.
Referencias:
- https://www.teacup.es/blog/post/que-es-gyokuro
- https://es.wikipedia.org/wiki/Gyokuro
- https://infusionesytes.wiki/gyokuro/
- https://puntodete.com/te-verde-japon/893-te-verde-gyokuro-takumi-bio.html
- https://www.biotea.es/te/te-verde-ecologico-gyokuro-superior
- https://www.botanical-online.com/productos-naturales/te-verde-gyocuro-propiedades
- https://www.tebebo.com/te-gyokuro/
- https://www.organicfacts.net/gyokuro-tea.html
- https://healthfully.com/521832-the-health-benefits-of-gyokuro.html
- https://www.enbuenasmanos.com/propiedades-de-la-l-teanina