Remedios Caseros para la Artritis

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¿Qué es la artritis?

Se entienden como artritis todas aquellas afecciones que presenten hinchazón en las articulaciones (zona en la que se juntan los huesos).

Esta hinchazón con el paso del tiempo puede derivar en una lesión grave, aunque se trata más bien de un síntoma pues podría ser resultado de distintas enfermedades relacionadas con ella.

Por lo tanto, es necesario que se lleve a cabo un análisis que determine el resto de síntomas a fin de que el paciente pueda recibir el tratamiento adecuado.

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Causas y síntomas de la artritis

Como se ha visto en el punto anterior el problema con las articulaciones puede estar incluido dentro del cuadro clínico de distintas afecciones por lo tanto, la hinchazón podría venir acompañada de otros síntomas.

A continuación se presenta una lista de las patologías relacionadas con la artritis, los síntomas y las causas que las provocan:

Patologías relacionadas con la artritis

Osteoartritis

La más común de ellas, afecta principalmente a las articulaciones de las manos, caderas, columna y rodillas causando dolor, inflamación y disminución de la movilidad. Este tipo de artritis degrada el tejido cartilaginoso encargado de amortiguar el impacto producido con los movimientos.

Cuando esto sucede, no hay nada que impida la fricción continuada en los extremos de los huesos, lo que provoca en ellos un daño permanente. Las causas principales de este tipo de artritis son el sobrepeso y el envejecimiento.

Artritis Reumatoide

Esta afección es de tipo autoinmune, es decir, se produce por un ataque inmunitario que realiza el cuerpo contra sus propios tejidos. Se desconoce la causa exacta por la que esto sucede, aunque se cree que la genética, el ambiente y las hormonas pueden influenciar en su aparición.

Al contrario que la osteoartritis que sólo se da en individuos de edad avanzada, ésta puede producirse también en adultos jóvenes o de mediana edad.

Tiene mayor incidencia en hombres que en mujeres y puede aparecer en episodios cortos y reaparecer al cabo de un tiempo. Afecta sobre todo en las muñecas y los dedos aunque puede atacar también a otras zonas como los ojos, boca y pulmones.

Artritis Juvenil

Esta también es una afección de tipo autoinmune de la que es difícil determinar las causas, pero en este caso se produce en niños. Produce inflamación, dolor y rigidez en manos, rodillas y pies.

Suele ser difícil de diagnosticar ya que los síntomas pueden aparecer por períodos cortos pudiendo afectar únicamente en un par de ocasiones durante esta etapa. Aunque existen casos en los que también se ha producido de manera continuada causando problemas en el crecimiento o daños en los órganos internos.

Si se observa cojera matinal es importante comunicárselo a un médico especialista ya que esta puede estar provocada por esta enfermedad.

Artritis Infecciosa

Tiene como origen una infección que normalmente comienza en otra parte del cuerpo y que se extiende hasta las articulaciones. Puede estar provocada por hongos, virus, o bacterias, por este motivo a los síntomas antes mencionados como la hinchazón, inmovilidad y dolor también hay que añadir otros como el enrojecimiento de la zona afectada, escalofríos y fiebre que son síntomas típicos de un cuadro clínico de infección, ya que esa es la manera en que el cuerpo se defiende de ese tipo de ataque.

Artritis Psoriásica

A menudo los pacientes que padecen psoriasis presentan también artritis de este tipo. La psoriasis como se sabe afecta principalmente a la piel, manifestándose en forma de marcas circulares similares a parches, estas se escaman y causan dolor, picazón y enrojecimiento. Cuando aparecen en la zona de las articulaciones como codos y rodillas ocasionan los síntomas asociados a la artritis antes descritos.

Gota

Este tipo de artritis es uno de los más dolorosos y comunes, está ocasionado por el exceso de ácido úrico en la sangre. Entre las sustancias de desecho producidas por el cuerpo humano está la purina, esta al descomponerse se convierte en ácido úrico que es transportado por medio del torrente sanguíneo hasta los riñones donde es procesado y más tarde expulsado a través de la orina.

Cuando no se realiza la expulsión de manera adecuada o si se consumen alimentos que contengan gran cantidad de purina (frijoles, guisantes secos, hígado y anchoas) el cuerpo se vuelve propenso a acumular ácido úrico, el cual toma forma de cristales con forma de aguja.

Estos cristales son los que provocan dolores en las articulaciones de las extremidades superiores e inferiores y pueden dar lugar también a la formación de piedras en los riñones. Normalmente el primer sitio afectado suele ser el dedo gordo del pie. Los dolores en principio suelen remitir pero vuelven a reaparecer al cabo de un tiempo, siendo cada vez más frecuentes.

Son más propensos a padecer gota los individuos de sexo masculino o personas con sobrepeso. El consumo de alcohol y los antecedentes genéticos familiares también son factores de gran influencia.

Esta afección suele confundirse con la pseudo gota con la que comparte síntomas con la diferencia de que en este caso el causante no es el ácido úrico sino el fosfato de calcio.

En todos estos casos el diagnóstico sólo puede darse por un especialista que realizará distintas pruebas médicas dependiendo de los síntomas, los cuales incluyen análisis de sangre, orina, rayos X, toma de muestra de cartílago, etc.

Tratamiento de la Artritis

En la actualidad no existe una cura definitiva para este grupo de afecciones pero el seguir un tratamiento adecuado es importante. Este dependerá del tipo de afección que padezca el paciente y el grado de intensidad con el que se presenten los ataques.

A pesar de ello existen algunas recomendaciones útiles que ayudarán a reducir la intensidad de los síntomas:

Mantener un ritmo de vida saludable
Descansar de manera adecuada
Llevar una dieta equilibrada
Consumir alimentos ricos en omega 3
Realizar terapia física para reducir el dolor
Aplicar compresas de agua fría para reducir la inflamación y de agua caliente para mitigar el dolor.